"NO ANDO
ODIANDO A NADIE" DIJO MUJICA.
NOSOTROS TAMPOCO, PERO QUEREMOS VER PRESOS A TODOS LOS ASESINOS, VIEJOS Y MÁS VIEJOS!!!
NOSOTROS TAMPOCO, PERO QUEREMOS VER PRESOS A TODOS LOS ASESINOS, VIEJOS Y MÁS VIEJOS!!!
Una cosa que el
Presidente PUEDE HACER es ABRIR TODOS LOS ARCHIVOS policiales, militares
y de la Inteligencia, todos los diarios de registro de
quienes estaban en los cuarteles y centros clandestinos cuando
desparecieron prisioneros, quienes revistaban en ese momento, quién era
el oficial jefe y el nombre de todos los clases y
suboficiales y entregar todo ese material a la Justicia y a los
investigadores de los DDHH. Eso LO PUEDE HACER.
Mujica hace "lo que puede" por los desaparecidos
El presidente Mujica participó este viernes de un concierto en la embajada de Argentin
El presidente José Mujica, afirmó este viernes que hace "lo que puede"
para que se haga justicia con los desaparecidos de la dictadura
(1973-1985) y que "no vive para odiar" pese a los catorce años que
pasó en la cárcel, la mayoría durante el gobierno de facto.
Al concluir su
participación en el acto de conmemoración del 202 Aniversario de la
Revolución de Mayo organizado por la Embajada Argentina,
Mujica fue increpado por una periodista que le preguntó
insistentemente por las gestiones que realiza su gobierno en la lucha
contra la impunidad."Vamos andando. No sé. Yo hago lo que puedo pero
no soy adivino y no puedo poner a nadie arriba de una plancha y
torturarlo", afirmó.
Mujica indicó después que "la justicia somos todos" y que las causas judiciales se van "encarando en la medida en que se anotan
(responsabilidades)".
Ante la
insistencia de la periodista, el gobernante agregó que "lo de atrás
también hay que cerrarlo y hay que suturarlo" porque "hay que
vivir"."Yo vivo para adelante, tengo que convivir con mis
contemporáneos y tengo que preocuparme por los problemas de los que
están naciendo y todos los demás", manifestó."Tenemos tribunales,
tenemos cuarenta personas buscando en la tierra" los restos de los
desaparecidos, "mandamos la información, rescatamos lo que podemos",
añadió.
En el acto
celebrado en la Embajada de Argentina, ofreció un concierto el músico
Miguel Angel Estrella, un activista argentino que estuvo preso
en la época de la dictadura en Uruguay, en la cárcel de Libertad
donde conoció a Mujica.
Al ser preguntado por Estrella, el jefe de Estado uruguayo recordó su etapa tras las rejas.
"Tengo 14 años preso, pero no ando odiando a nadie. Acepto las canas, las arrugas y los dolores, pero no vivo para odiar", explicó Mujica.
"Tengo 14 años preso, pero no ando odiando a nadie. Acepto las canas, las arrugas y los dolores, pero no vivo para odiar", explicó Mujica.
Argumentó además
que si Estrella mantuvo viva su esperanza en la cárcel por la música
que imaginaba en su cabeza y no podía tocar, a él le
ayudó "hacer rayitas en la pared" y las "ranas" que fue acumulando
en el pozo donde estuvo en duras condiciones como rehén de la
dictadura."Llegué a tener siete ranas, de esas chiquitas de zarza,
y les ponía un vasito para que se bañaran, y llegué a tener en Paso
de los Toros una rata que venía a la una de la mañana a buscar unas
miguitas", contó.
Por último, Mujica relató que en aquella etapa descubrió que "las hormigas gritan".
"Cuando vaya a su jardín agarre una hormiga y la pone acá (se señala el oído), la va a sentir gritar, pero hay que tener oído", dijo medio en broma, medio en serio.
"Cuando vaya a su jardín agarre una hormiga y la pone acá (se señala el oído), la va a sentir gritar, pero hay que tener oído", dijo medio en broma, medio en serio.
Cuando Mujica
sostiene que él "no anda odiando a nadie" y que "no vivo para odiar" no
puede dejar la frase a medio decir. Dicho A debe de decir
B. Si él no odia se supone que hace la referencia porque hay otros
que sí , que "viven para odiar". Debe de decir a quienes se está
refiriendo y no lanzar insinuaciones.
Cualquiera se da cuenta
de que está hablando de los familiares de los desaparecidos y de
todos los que han denunciado torturas y violaciones, pero lo hace sin
decirlo abiertamente.
Al mismo tiempo,
y en el mismo estilo de decir cosas a medias, deja flotando en el aire
que los que reclaman por la aparición de los
desaparecidos y porque se condene a los criminales de lesa
humanidad, en realidad no están reclamando justicia y verdad sino que lo
hacen por odio.
Es un estilo que
usa el Presidente para denigrar justas luchas y reclamos apoyados por
lo menos por la mitad de los uruguayos, para
desacreditarlas quitándoles su carácter justo y humanista y
colocándolas a niveles de bajas pasiones.
Lo que mucha
gente odia es la justificación de los crímenes a partir de una postura
individual. A cada rato pone sobre la mesa su vivencia como
prisionero y rehén de los asesinos para utilizarla en función de lo
que es una postura POLÍTICA INDIVIDUAL de perdonar a los criminales.
Está en su derecho bien ganado en los aljibes y jaulas a
los que fué sometido en su prisión. Es su postura individual. Pero
no puede hacer de ella UNA POLÍTICA DE ESTADO Y COMO PRESIDENTE TIRARLO
COMO LÍNEA DIRECTRIZ, es decir, proponer a partir de su
perdón individual a los criminales que el estado viole todas las
convenciones vigentes sobre desapariciones, torturas, vejaciones y
violaciones, delitos todos de LESA HUMANIDAD QUE NO
PRESCRIBEN.
El Presidente NO
TIENE DERECHO DE PROPONERLE A LAS VÍCTIMAS Y A TODOS LOS DEMÓCRATAS
URUGUAYOS EL QUE SE DEJEN EN EL OLVIDO LOS CRÍMENES DE
LESA HUMANIDAD. Se extralimita en sus funciones. Y lo peor es que lo
hace dejando entrever que quienes no compartan su postura "viven para
el odio".
Lo que se odia
es la injusticia, se odia el que asesinos de prisioneros, que criminales
desaparecedores de hombres y mujeres del pueblo, y que
secuestradores de bebés que actuaban a nombre del estado no reciban
la condena correspondiente por esos delitos - repetimos una vez más -
crímenes de lesa humanidad.
Se empieza a
odiar el destrato descarado a la lucha de los familiares, se empieza a
odiar el uso indebido de funciones gubernamentales para
pasarle por arriba a todos los convenios internacionales sobre los
DDHH, se empieza a odiar el que se pretenda que la sociedad olvide en
función de llamadas estrategias políticas, se empieza a
odiar la defensa en la práctica de la impunidad y se empieza a
odiar - también - el que se le esté abriendo la puerta a un Hitler que
sabe que podrá actuar sin riesgos, con total
impunidad.
Todo eso se
comienza a odiar más y más, porque quienes llegan al gobierno por el
voto popular no han llegado a ese cargo solo para dar "un
plato de sopa" como descaradamente se ha sostenido, han llegado a
asumir responsabilidad de gobierno para que también se hiciera justicia.
Mucho "nuevo" odio se viene acumulando ante el destrato,
la irreverencia de los aparatos y los caudillos, y la manifiesta
infidelidad a los postulados populares.
Colectivo del Blog Noticias Uruguayas
28 de mayo de 2012