Presentación de La Comuna en Valladolid
El jueves pasado, 21 de febrero, La Comuna, federación de Castilla-León, se presentó en el Ateneo Republicano de Valladolid ante algo más de cincuenta personas.
En la mesa, y representando a La Comuna, Ramiro Calvo por Ávila, Acacio Puig por Burgos, Antonio Chapero por Tarragona, Arturo Villar por La Rioja y Raúl González por Madrid.
Ramiro explicó como la aparición pública del movimiento memorialista nos hizo conscientes de la responsabilidad histórica que teníamos aquellas mujeres y hombres que sufrimos durante el tardo franquismo las persecuciones del Brigada Político Social de la Dictadura, la detención y la tortura, así como la represión y las condenas del Tribunal de Orden Público y cómo de esa toma de conciencia surgió hace dos años y medio y nos llevó a fundar “La Comuna, presas y presos del franquismo”.
Explicó como la Amnistía de 1977 fue una ley de punto final en la que los principales amnistiados fueron los jueces y torturadores del franquismo y cómo La Comuna quiere denunciar eso y acabar con esa impunidad.
“Nosotros no somos las víctimas del franquismo, las víctimas fueron nuestras madres y seres queridos, nosotros somos los combatientes antifranquistas del final de la dictadura” concluyó.
Antonio Chapero, por su parte, relató de manera muy emotiva, cómo fue detenido el año 1970 y condenado a un año y medio de cárcel y cómo, al salir de la prisión, se fue a vivir a Valladolid para evitar la persecución policial, que nuevamente le localizó el año 73 y fue detenido e interrogado por los famosos torturadores de la BPS, Willy el niño y el Gitano, en ocasiones en presencia de su hijo de tres años, y condenado por el TOP a dos años y medio, siendo ingresado en la Prisión Provincial de Carabanchel hasta la muerte de Franco.
Acacio Puig explicó cómo el emplazamiento de su domicilio actual (entre Burgos y Segovia) le obliga a rememorar cotidianamente la barbarie impune del franquismo. Esa zona desde la que escapaban hacia Guadalajara y Madrid, a través de Somosierra y la Sierra de Ayllón, los republicanos que huían del Burgos de Franco y Mola, le ha permitido conocer de cerca algunas obras realizadas mediante el trabajo esclavo de los batallones de presos del franquismo, tales como el embalse de Linares y el ferrocarril de Madrid-Burgos
Aclaró también que La Comuna pretende rescatar la memoria del periodo histórico que le toco vivir a la llamada “Generación del TOP”; que el objetivo común del Movimiento Memorialista es llevar a juicio a la dictadura y que, puesto que el Tribunal Constitucional rechazó la posibilidad de juzgar a la dictadura franquista, amparándose en la Amnistía del 1977, la Querella contra el Franquismo, cursada el 14 de Abril del 2010 al amparo del Principio de Justicia Universal y aceptada por los tribunales de justicia en Argentina, es el instrumento con el que tratamos de conseguir ajustar cuentas a torturadores famosos como Celso y Pacheco, aún vivos, y como Yagüe, ya muerto, pero condecorado con la Medalla del Mérito Policial, ya en democracia; con aquellos que negociaron con el franquismo para su propio lucro personal, como Banús, Duro-Felguera o la Banca March y explotaron la mano de obra esclava de los presos del franquismo y con los jueces que, tras la disolución del TOP, pasaron a la Audiencia Nacional y al Supremo.
Explicó, así mismo, que la Querella Argentina continúa su proceso y que en el mes de Abril se prepara una asamblea de querellantes de todo el Estado y un nuevo viaje a Argentina para impulsar la marcha de la misma y que la Querella busca la reparación política y material de los perjudicados por la dictadura y que no acepta como tal las indemnizaciones recibidas por los gobiernos de la democracia.
Tuvo también un recuerdo para los Memoriales y la museografía antifranquista de los que dijo: son una “asignatura pendiente”. Citó los memoriales de Candeleda en Ávila, de la Universidad de Madrid a la Brigadas Internacionales, de Jaca a Fermín y Galán y de Burgos a presas y presos del franquismo y a la lucha específica de las mujeres y puntualizó que si los memoriales no son cuidados se facilita el que sean agredidos por los fascistas.
Convocó a la Reunión de la Plataforma Unitaria del próximo día 9 de Marzo en Burgos para rendir homenaje a las mujeres antifranquistas y enfatizó la importancia de internacionalizar la memoria con actos a favor de los presos políticos palestinos, de reforzar los lazos con el memorialismo francés y de dar digna sepultura a Francesc Boix, fotógrafo del campo de concentración de Mauthausen, testigo en los juicios de Nuremberg y fallecido en París a los 32 años de edad y que irá a parar a una fosa común a finales del 2014 si el memorialismo no es capaz de financiarle una tumba.
Terminó su interesante intervención animando a los vallisoletanos a formar parte de la Red de Apoyo a la Denuncia Argentina.
Arturo Villar resaltó en su intervención la positiva experiencia que supusieron para él los tres años de cárcel que tuvo que soportar y la escuela de convivencia y compañerismo que fueron para él. Recordó también como sus camaradas presos con él, profesores de matemáticas y biología le ayudaron a cursar el bachillerato en esos tres años y aclaró que nuestra indignación no es ni mucho menos amargura, sino espíritu vivo que sigue soñando con un mundo mejor y en nuestra capacidad de transformar las actuales circunstancias.
Tras estas intervenciones se produjo un animado coloquio en el que los asistentes señalaron entre otras cosas que, aunque el Libro negro del franquismo está todavía por escribir, existían en Valladolid algunos testimonios escritos de esa época, tales como Vallisoletanos contra Franco, obra que analiza el franquismo hasta los años 60 y que recoge los expedientes de los vallisoletanos encarcelados en aquellos años.
Finalmente, cabe señalar que se recogieron más de quince apoyos a la querella argentina y nuevas adhesiones a la red regional de La Comuna.